jueves, 22 de marzo de 2007

muchas gracias angel por animarme¡¡ espero que, como ya lo he conseguido, lo vaya mejorando. ya pondre alguna noticia interesante(cuando tenga tiempo...). un saludo.

viernes, 16 de marzo de 2007

buno angel, lo he intentado.
no esta muy bien lo que he hecho pero algo es algo...
me ha quedado muy feo pero el caso es que ya esta puesto no¿
bueno pues nada mas.
TRABAJO DE HISTORIA ORAL




PRESENTACÓN



Mi trabajo de historia oral lo he realizado con mis abuelos paternos, Simón, que nació el 28 de octubre del 1927 y Sagrario, el 11 de febrero de 1935 y mis padres en “el franquismo final y la transición democrática”.
Mi abuelo tenia 9 años y me ha contado lo que ocurrió en nuestra familia y en nuestro pueblo en general. Mi abuela tenia 1 año, no se acuerda de nada puesto que era un bebe pero nos ha echado una mano a mi abuelo y a mi.

Los escogí a ellos porque son los que más me pueden guiar sobre este trabajo.
Cuando les pedí ayuda para hacerlo ellos aceptaron contentos.

La entrevista la hicimos en su casa juntándonos varias tardes los tres.
Su actitud ha sido positiva y han puesto mucho interés en el asunto.
Yo he escuchado como me contaban historias de su pasado y he aprendido como vivieron su infancia.

Mis padres podían contarme con más certeza lo que vivieron en “la transición democrática” puesto que la tienen más reciente y se dieron cuenta de muchos cambios, por eso me ayudaron ellos con este tema.
FICHAS DE LOS ENTREVISTADOS
ABUELO PATERNO
NOMBRE: Simón de Cabo
FECHA DE NACIMIENTO: 28 de octubre 1928
VIVÍA EN: Pitiegua
PROFESIÓN: Agricultor
BANDO EN LA GUERRA CIVIL: Franquista


ABUELA PATERNA
NOMBRE: Sagrario Fernández
FEHA DE NACIMIENTO: 11 de febrero 1936
VIVÍA EN: Pitiegua
PROFESIÓN: Agricultora y ama de casa
BANDO EN LA GUERRA CIVIL: Franquista


MIS PADRES
NOMBRES: Máximo de Cabo y MªLuz González
FECHAS DE NACIMIENTO: 4 julio 1960 / 23 marzo 1961
VIVÍAN EN: Pitiegua
PROFESIONES: Agricultor y ama de casa
TESTIMONIO ORAL
LA GUERRA CIVIL

-Qué papel ocupa en tu propia vida la guerra de 1936: recuerdos, preocupaciones, sentimientos vividos en el ambiente familiar; si se habla o no de aquella época, la valoración general de la misma, etc.

“Aquí ya no se habla de la guerra porque ya se pasó”

-Dónde y cómo pasaron la guerra las personas de tu familia. Procura distinguir entre hombres y mujeres, entre niños y grandes, concretando en lo posible fechas y periodos.

“Cuando estalló la guerra mis tíos (hermanos de mi madre) eran cuatro. Me acuerdo que era en el verano y tres estaban casado y uno libre, y los tres tuvieron que ir a la guerra, entonces los abuelos lo pasaron muy mal no hacían mas que llorar... Pero bueno tuvieron suerte que a ninguno le paso nada G.A.D (gracias a dios). Los demás de la familia estábamos en el pueblo.”

-Padres e hijos. ¿Cómo y en qué aspectos influyó la guerra en su relación?.
“No afecto en nuestra relación, ya que, aquí en el pueblo no se distinguía nada, lo mismo antes de la guerra como después”.

-La muerte. ¿Qué lugar ocupaba en sus vidas?. ¿La tenían muy presente?.

“Aquí no hubo destrozos como en el pueblo de al lado (Pedroso de la Armuña) porque tuvimos la suerte de que estuviera aquí Don Diego Veloz. Era un capitán retirado del ejército. Este señor cuando estaba en el ejército le salvó la vida a un general de un disparo, y el general le dijo que le daba lo que quisiera: o libertad o lo que le pidiera, y él eligió la libertad. Don Diego vivía en Cañadilla (hoy en día una pequeña aldea) y era el único que tenía pistola en esa época. Gracias a él cuando vinieron en busca de los pocos republicanos que había Don Diego le dijo que aquí no había nadie y que se fueran y por eso no pasó nada grave”

-El entusiasmo. ¿Estaban entusiasmados con frecuencia por cosas relativas a la guerra: victorias, recibimientos, etc,?

“Pues nada de eso, porque aquí no llegaban las noticias y no nos enterábamos de mucho”.

-Las mujeres en la guerra. ¿Cómo vivieron la guerra, qué ocupaciones realizaban diariamente?, ¿Realizaban tareas específicas para la guerra (confección de prendas para soldados, etc,?

“A las mujeres les tocaba ir al campo con los hombres para ayudar en lo que fuera, sobre todo en el verano porque todo se hacía a mano. Antes de salir de casa dejaban el puchero puesto para que cuando volvieran estuviera cocido. Lo ponían a la lumbre de paja garrobaza, que era de las algarrobas, con lo que alimentábamos a los bueyes, ¡qué costumbre!, yo hasta cundo tuve treinta y ocho años.
Aquí no tenían tareas específicas solo eso”

-Las ideas sobre la mujer. Si en su entorno había debate sobre el papel de la mujer (emancipación de la mujer; el ideal de mujer cristiana frente a otros comportamientos).

“Todas las ideas eran parecidas no se discutía nada, ni antes ni después de la guerra. Todo la importancia era de los hombres ellas no participaban en política ni en nada. Tampoco podían ir al bar, ni de pequeñas ni de grandes”.

-La alimentación. Dónde se abastecían; si tenían problemas para conseguir determinados alimentos; cuál era la dieta habitual, etc.

“Pues la alimentación la obteníamos de casa. Teníamos cerdos, gallinas, conejos y ana cabra para toda la familia, y se le vendía la leche al cura y al médico, así que cuánto podías beber...También nos tocó comer una sardina para dos.
Mi abuela: “pues en mi familia como éramos menos personas tocábamos a una sardina entera para cada uno y si bebíamos bastante leche”. “Se solía comer más carne que pescado porque no llegaba todos los días”

-El resto de recursos de primera necesidad: ropa, calefacción, etc.

“Usábamos pantalones cortos y por debajo de las rodillas. Los jerséis estaban hechos con la lana de las ovejas y los hilaban las abuelas con el uso, el aparato de hilar; también hacían los calcetines. No nos la comprábamos, nos la pasábamos de unos a otros.
El calzao eran las albarcas hasta para ir a la escuela.

La calefacción era el brasero de paja y la lumbre, donde todos nos poníamos alrededor de ella.
Me acuerdo que no había canalones y como las calles eran de arena se formaban muchos barros”.

-¿Hubo en la familia casos de trabajo femenino, por la necesidad de sustituir a los hombres?

“Todos teníamos que trabajar. Los niños al salir del colegio jugaban al chico, un juego de pelota y luego iban a buscar paja todos los días para los bueyes”

-Las comunicaciones a larga distancia. ¿Cómo funcionaba el correo, el teléfono, el tren?. ¿Cómo se desplazaban ellos?.

“Sólo nos comunicábamos por cartas, no había teléfono. El cartero tenía que ir a buscar el correo al tren todos los días.
Para ir a Salamanca usábamos el tren y a veces en la burra, que yo fui con mi madre hacer compras,¡no se me olvida!”.

-Las propiedades. ¿Qué tipo de propiedades tenían y su importancia?. ¿Experimentaron miedo a perderlas antes o durante el conflicto?.¿Se produjo algún tipo de requisa para sufragar la guerra?.

“Las pocas fincas que tenían mis padres eran casi todas de rentas... para poder sobrevivir trabajábamos cuando no había escuela, todos aportábamos lo que podíamos.
¡Sí! La requisa era un buey. El pueblo tenía que poner uno cada año”.

-Las divisiones ideológicas o políticas dentro de la familia. ¿Cuales fueron las relaciones entre ellos antes, durante y después de la guerra?

“En aquellos tiempos no había pensión y mi abuelo decía que no habláramos muy alto porque le quitaban las 3000 pesetas que le daban. Tampoco había seguridad social y había que pagar todas las operaciones.
Sobre la política, en la familia unos lo veían mejor y otros peor, y hablábamos algo de esto porque éramos muchos hombres y pocas mujeres”

-¿Quiénes apoyaban a uno y otro bando en la localidad en que vivía? ¿por qué cree que lo hacían unos y otros?

“Casi todo el pueblo éramos franquistas menos unos cuatro o cinco que eran republicanos. Cuando vinieron en busca de los de este bando se refugiaron en casa de Don Diego y los salvó de que se los llevaran. Aquí en el pueblo no nos delatamos unos a otros y no pasó nada”


-La experiencia militar de la guerra, si la hubo en la familia: movilización, frentes en que combatió, experiencias concretas significativas, si cayeron prisioneros. Etc. Después de la guerra ¿Cuánto tiempo siguieron movilizados después de la guerra?. Se les tocó caer presos o en un campo de concentración, etc.: Relatar con detalle cómo fue ( condiciones, si hubo algún proceso judicial, etc,)

“Mi bisabuelo por parte de mi abuela tuvo que jurar bandera 2 veces y no fue a la guerra porque como eran tres hermanos, él se libró y tuvieron que ir sus 2 hermanos. A uno de ellos le dieron un tiro y la bala le dio en la cartera y no le pasó nada”

-Enfermedades y epidemias sufridas en el propio entorno.

“Pues epidemias no hubo, sólo los tíos que estuvieron en la guerra que cuando venían
alguna vez traían piojos y tenían que cocerle la ropa”.


LA PRIMERA ETAPA DEL FRANQUISMO: AÑOS 40 Y PRIMEROS DEL 50


-¿Se mantenía el odio o la marginación a las personas o familias que lucharon con la República?. ¿Se produjeron llamadas públicas a favor del perdón o se hizo algo por la integración social de los vencidos?

“Recuerdo que como castigo, a los pocos republicanos que había, le hicieron ir a misa y ponerse en el altar mayor para ridiculizarlos. Por lo demás nada”

-La iglesia. ¿Se hacía notar mucho su importancia y presencia respecto a la época anterior? ¿Cómo se manifestaba ese poder y mayor presencia? ¿Llevaban los curas control de la práctica religiosa? ¿En qué aspectos?. ¿Tuvieron que solicitar del cura párroco algún certificado o aval para otras actividades?

“Todo el mundo tenía tenia que ir a misa. Me acuerdo que el maestro era el primero que estaba en la iglesia y se ponía en la entrada para vigilar a ver quien faltaba. Si alguna vez no ibas, al día siguiente te daba unas bofetadas en el colegio”

-La religión en sus vidas familiares. ¿Cómo les condicionaba aspectos como las relaciones personales, el vestir, el comer, el trabajo, etc.? ¿Qué tipo de prácticas religiosas realizaban con más frecuencia?

“En mi casa se rezaba todos los días el rosario y todos los domingos íbamos a misa.
Como condiciones en el comer, que los cuarenta días antes de semana santa los viernes no se comía carne y por lo demás nada”

-La escuela. ¿Qué recuerdo guardan de la escuela y los maestros que tuvieron ellos o sus hijos? ¿Hasta que edad se iba a la misma? ¿En qué condiciones se estudiaba en la escuela y en casa?, ¿Con qué libros y material (pizarras, etc).

“En la escuela no era como ahora. Los maestros nos tenían a raya y nos pegaban cuando no nos sabíamos la lección. Se iba asta los 14 años y luego nos poníamos a trabajar con nuestros padres. Estudiábamos un poco después de estar jugando con los amigos. Los materiales que teníamos eran pocos, sí, recuerdo las pizarras”



-Los juegos y canciones infantiles de moda entonces. Recoger con el mayor detalle si nos son hoy conocidos.

“Nosotros nos divertíamos tirando cacharrazos, que consistía en abrir las puertas de las casas y tirarle una teja dentro o un cubo de agua o cosas parecidas y luego salían corriendo detrás de nosotros; también saltábamos por los corrales y le robábamos los conejos y luego lo llevábamos al bar para que los dueños nos lo cocinaran y allí nos los comíamos.
También celebrábamos los quintos el día de noche vieja, hacíamos una hoguera y escribíamos nuestros nombres en el juego pelota (la pared de la iglesia). El día de año nuevo íbamos por todas las casas del pueblo y le pedíamos un chorizo y luego invitábamos a los mozos a comer en el bar, pero sólo los mozos las muchachas nada. A las personas que nos daban un chorizo pequeño se los colgábamos en le llamador y no lo cogíamos, para burlarnos de ellos
El día uno de mayo se ponía el ‘mayo’ que era un pino puesto en la fuente con un tirinene con naranjas. La noche anterior salíamos y le poníamos en las ventanas de las mozas un ramo y le cantábamos las rondas a la que nos gustaba, cuando teníamos novia le poníamos un ramo más grande. Luego, el día tres de mayo se bendecían los ramos y se caía el ‘mayo’ “.
“Algunas rondas que cantábamos y versos de los que nos acordamos: “

A tu puerta estamos cuatro,
cuatrocientos en cuadrilla,
si quieres que te rondemos,
saca cuatrocientas sillas.

Un limón eche a rodar
A tu puerta se paró
Hasta los limones saben
Que nos queremos tú y yo.

Adiós que me voy sin verte
Mi corazón sin amarte m
Mis labios sin darte un beso
Y mis brazos sin abrazarte.

Anda diciendo tu madre
Que yo contigo no igualo
Eso será en el dinero
Porque en lo demás te gano.



Anda diciendo tu madre
Que para ti la reina es poco
Anda y vete a la alameda
Y allí te arrimas a un chopo.

Desde que te conocí,
estoy seco como un hilo.

Adiós adorada prenda
Que me vengo a despedir
Y el alma se me quebranta
Al separarme de ti.

Mi suegro pa que le quiera
Me ha regalado un rosario y
No sabe que con su hijo
Tengo yo cruz y calvario.

En esta calle que entramos
Dice que no vive nadie
Vive el sol, vive la luna
Y el lucero cuando sale.
La despedida te doy
La despedida y no puedo,
Que despedirme de ti
Es despedirme del cielo.

Eres chiquita y bonita
Eres como yo te quiero
Más linda que las naranjas
Que venden los naranjeros.

El amor a de ser uno
Que así lo dispuso Dios,
No siente amor por ninguno
La mujer que quiere a dos.


Lo mismo es decirme a mi
Que te olvide y no te quiera
Que decirle al sol
Que pare en medio de su carrera.

Pensando darlo en tu boca
En el aire he dado un beso
Y el beso al caerse



-El baile. ¿Cómo y dónde se organizaba y el tipo de bailes que se desarrollaban.? ¿Cómo intervenía la Iglesia o las autoridades sobre determinados aspectos (tipos de bailes, iluminación, horarios, etc?

“El baile era todos los domingos por la tarde, empezaba a las cinco o así y se acababa al oscurecer y ya nos íbamos para casa.
Sólo lo pagábamos los mozos y luego invitábamos a las mozas, los padres sólo iban a ver.
El más mayor administraba el dinero y luego se lo dábamos a los músicos.
Se hacía en la plaza cuando hacía calor y en el salón cuando hacía frío.
Los días festivos había por la tarde y luego por la noche, que empezaba a las diez y terminaba a las doce.
En el tiempo bueno las madres cogían las sillas y se sentaban allí para ver con quién bailaban los hijos”.

EL FRANQUISMO DE LOS AÑOS 60: LA ERA DEL DESARROLLO.

EL FRANQUISMO FINAL Y LA TRANSICIÓN DEMOCRÁTICA

-Los cambios en la agricultura de los años 60: la mecanización, la bajada de los precios, la necesidad e emigrar. A qué sitios, cuánto tiempo.etc.

“La agricultura cambió. Antes se sembraban las patatas con el saquito y se iban pisando para que quedaran en el cerro y después en tiempos más adelante con la sembradora.
Aparecieron los tractores en vez de los bueyes y mulas. Desaparecieron las segadoras y limpiadoras y aparecieron las cosechadoras.
Con el mercado común han bajado los precios.
Hubo muchas emigraciones a la ciudad por falta de trabajo en el campo”.

-Los cambios en las costumbres: en la escuela, en la Iglesia, con los amigos, en las diversiones, etc.

“En la escuela: empezaron a existir escuelas mixtas para chicos y chicas. Antes se estudiaba con la enciclopedia y con el cambio se comenzaron a comprar libros y a estudiar idiomas: el francés. Se dejaron un poco aparte los castigos de las copias, nos hacían irnos para casa con el babi para cuando llegáramos nuestras madres supieran que no nos habíamos sabido la lección; también nos hacían ponernos de rodillas y nos daban con la regla...
La Iglesia perdió poder y dejaron de poner multas por no ir a misa y de vigilar tanto. También no podíamos desayunar antes de tomar la forma y en Semana Santa no podíamos cantar por la calle y no había baile.
Con los amigos: empezamos a salir todos juntos y a tener novios y novias y a salir fuera del pueblo de fiesta”.

-Las diversiones y los gastos de la propina a los 15 años.

“Las diversiones: se dejaron los bailes del domingo en la plaza y los jóvenes empezamos a ir a la discoteca de Arabayona, el pueblo de al lado. Íbamos a Salamanca de vez en cuando y nos dejaban ir solos en las ferias. También empezamos a ir al cine.
Nos daban de paga 1 ó 2 pesetas y los días de fiesta 1 duro. Nos comprábamos chicles bazana y bolas de anis.”

-Los cambios en la casa: el agua corriente, el cuarto de baño, la cocina de gas. El frigorífico, el televisor, etc.

Mi madre: “en mi casa fue donde se hizo el segundo cuarto de baño en el pueblo, porque antes íbamos al corral.”
“Solo había una tele en el pueblo y estaba en el salón. Pagábamos 3 duros al año para verla.
Antes de aparecer el frigorífico los alimentos se conservaban en las bodegas y las despensa que se hacían en los sitios más frescos al norte.
Cuando apareció la cocina de gas fue más fácil cocinar, pues antes se usaba la chapa y la lumbre de paja”.

-Los cambios en las relaciones con los padres.

“Se dejó de hablarle de usted a los padres y se tenía más confianza y más libertad para hablar”.


-La vivencia de la muerte de Franco en el propio entorno.

“Se pensaba que iba haber una guerra por temor a lo que pudiera pasar porque no se entendía lo que era la democracia.
En cierto sentido nos alegramos de que se muriera ya porque no había libertad y no se podía ni hablar”

-La llegada de las libertades y de las primeras elecciones libres. ¿Temor?, ¿Esperanza?, ¿Indiferencia?, etc.

“Temor porque no se sabía como se votaba y si votabas bien o mal; y esperanza de que las cosas cambiaran para bien”

-La aprobación de la Constitución de 1978.

“Nos pareció bien porque pensábamos que con las leyes el país funcionaría mejor y se progresaría en todos los sentidos”.

-El golpe de Estado del 23 de febrero de 1981.

“Ese día yo iba a buscar el petate para incorporarme a la mili ese mismo día y estaba muerto de miedo porque pensaba que se iba a estallar una guerra y me tocaría ir”.

-Vivencia de los cambios en todos estos años: en la economía, en las costumbres, etc.
Con el mercado común y la llegada de la democracia España va mejor.


CONCLUSIÓN Y VALORACIÓN DEL TRABAJO


Este trabajo me ha ayudado a enriquecerme y saber valorar lo que tenemos ahora, por eso no me ha desagradado tenerlo que hacer.

En un principio no me hacia mucha ilusión, que digamos, hacerlo pero una vez que empecé le cogí el gustillo a enterarme de cosas de nuestro pasado más cercano.

La verdad, es que, me he enterado de muchas historias que me parecían increíbles porque nunca lo hubiera imaginado.

Ha sido una experiencia que yo recomiendo que no se pierda y los compañeros que nos sigan se animen hacerlo, que estoy segura que le ocurrirá como a mí.